Década del ’70. Mientras en países como Argentina el panorama era lúgubre e impredecible, Estados Unidos bailaba al ritmo de la música disco. Un fenómeno que trascendió las pistas de baile para influir en la cultura popular de aquel entonces, como la música y la moda. Hubo una película que capturó esa esencia, además de catapultar a su protagonista al estrellato. Una película que, al día de la fecha, continua siendo homenajeada o parodiada en donde sea.Así comienza la nota sobre Fiebre de sábado por la noche (Saturday night fever, 1977), que pronto cumple treinta años de existencia.
Como vimos, durante la década de los '60 hubo muchas manifestaciones sobre un mundo mejor, un mundo mas pacifico y terminar con el sistema capitalista que se venía llevando a cabo y que era el principal autor de todas las desigualdades, la violencia, y la injusticia en la que se vivía en la época.
Video sobre la pelicula: "Fiebre de sabado por la noche"
Argumento
Esta película no sólo fue un éxito en taquilla, sino que impulsó el movimiento Disco por todo el mundo convirtiéndose en un fenómeno sociocultural que cambió drásticamente el estilo de vida por aquella época. En la película se sugiere un estilo diferente de vivir la vida a través de tópicos de la cultura Disco, como la forma de vestir (uso de plataformas, camisas de cuello en V, pantalones de campana) y el baile, influenciando enormemente a la generación de la década de 1970, por lo que no es difícil ver las raíces de este estilo aún vigente en la cultura pop. También destaca el papel de los DJs y los decorados, muy luminosos gracias al uso de la Disco ball, estrobers y pistas de luces.
La fiebre siempre deja secuelas.
En 1983, Fiebre... tuvo su segunda parte: Manteniéndose vivo (Stayin’ alive). Travolta regresó al papel de Tony, pero la dirección corrió por cuenta de Silvester Stallone, quien hace un cameo a lo Hitchcock. Si bien la original tenia algo de Rocky (John Avilsen, 1976), acá los paralelismos son más explícitos. Manteniéndose... nos muestra a Tony Manero (sobre)viviendo en Nueva York, trabajando de camarero y de instructor de danza. Pero su ambición es triunfar en Broadway. A la película no le fue bien en recaudaciones ni con la crítica, pero no está taaan mal. Se deja ver y punto. Además, siguen habiendo temas de los Bee Gees, más otros de Frank “El-hermano-de” Stallone. Aquel marcó el comienzo de la prolongada decadencia de Travolta, que recién volvió a la lista A de estrellas hollywoodenses por hacer del matón de poca monta Vincent Vega en Tiempos violentos (Pulp fiction, Quentin Tarantino, 1994), donde, para variar, se despacha con otros antológicos pasitos de baile.
Muy bien.
ResponderEliminarEl subtítulo "La fiebre siempre deja secuelas", genial.
Saludos.